¿Qué es la anemia?
La anemia es uno de los síntomas más comunes de los fibromas. Ocurre cuando el cuerpo pierde hemoglobina en sangre a un ritmo más rápido del que puede generar nuevos glóbulos rojos. Las personas anémicas experimentan fatiga, mareos, confusión y una sensación general de debilidad. Si no se trata, puede provocar problemas graves, como complicaciones en el embarazo, latidos cardíacos irregulares, soplos cardíacos, agrandamiento del corazón o incluso insuficiencia cardíaca.
¿Cómo se relacionan los fibromas y la anemia?
Los fibromas uterinos suelen ir acompañados de un flujo menstrual más intenso, en el que las mujeres pierden más sangre de la que normalmente perderían durante su período. Esto suele ser el resultado de la ubicación de un fibroma dentro de la cavidad interna del útero. A medida que el fibroma ensancha el revestimiento del útero, las mujeres experimentan una mayor pérdida de sangre. Los miomas también provocan un desequilibrio o trastorno hormonal, provocando que el útero se contraiga y genere una mayor pérdida de sangre durante la menstruación.
Un sangrado abundante o excesivo significa que una mujer que sufre de fibromas también perderá grandes cantidades de hierro y hemoglobina, lo que provocará una falta de oxígeno en su cuerpo, lo que provocará anemia por deficiencia de hierro.
Síntomas de anemia:
- Dificultad para respirar
- Fatiga
- Mareo
- dolores de cabeza
- Dolor en el pecho
- Debilidad